Los monaguillos (niñas y niños) ayudan al sacerdote y al diácono durante la Misa y otras ceremonias litúrgicas. Se espera que estén debidamente preparados, comprometidos a dar su tiempo y talento a la comunidad parroquial y dispuestos a servir al pueblo de Dios. Deben ser capaces de comprender la celebración eucarística y los demás ritos sagrados. El ministerio está abierto a niñas y niños una vez que hayan recibido la Primera Comunión y que asistan a una escuela católica o estén inscritos en clases de Educación Religiosa. Se proporciona formación.